Proyecciones para el 2025 - 12 estrategias para superar el síndrome de diciembre

Llegan las festividades de este diciembre, y con ellas se aproxima un “Año Viejo” que traerá consigo una diversidad de emociones para los ecuatorianos. Entre rituales y tradiciones, el impacto del cierre de ciclo en la salud mental de las personas, el llamado ‘síndrome de fin de año o el síndrome de diciembre’, será parte de la tendencia emocional de esta temporada alrededor del mundo.

El artículo de National Geographic ¿El cambio de año afecta a nuestra mente? aborda esta problemática psicológica desde la mirada de varios especialistas. Entre ellos, Saulo Velasco, experto en habilidades cognitivas de Brasil, para quien este fenómeno emocional está relacionado al funcionamiento del cerebro, la influencia de la cultura y refleja la forma de entender el tiempo. Las expectativas requieren ajustarse a la realidad, según señala el neurocientífico brasilero Yuri Busin. Ante la eventual frustración por trazarse metas excesivamente altas, se recomienda plantearse objetivos más pequeños, como parte del proceso de lograr metas mayores en el largo plazo, según sugiere este experto. 

Tanto entre quienes van a evaluar las metas alcanzadas de los últimos 365 días, y los que proyectarán sus metas para los siguientes, en ambos casos serán variados los sentimientos respecto al cumplimiento de expectativas, siendo la frustración de lo no logrado y la ansiedad sobre la incertidumbre los más comunes. 

Contrariamente, hay quienes consideran que este momento podría ser fuente de emociones positivas. El enfoque de un experto en finanzas personales como Gonzalo Ruales, Gerente de Activos de Fideval, ratifica que la planificación financiera debería ser parte del ritual de toda persona durante el periodo festivo, y en especial cuando pensamos en las perspectivas del nuevo año. Para Ruales, conocer más sobre el manejo del dinero favorece directamente en la forma de enfrentar el futuro. “Creemos que los proyectos personales inician como sueños, pero se vuelven realidades cuando existe intención clara, enfoque temporal y recursos bien administrados” afirma el experto, quien destaca que, en todo sueño, planificar es el primer paso. 

La experiencia y apuesta por la planificación para el próximo periodo es parte de la apuesta Fideval, al dar acceso a los fondos de inversión a las personas naturales de diversos segmentos en Ecuador. Esta empresa líder con 30 años de experiencia cierra el 2024 con 16.533 de nuevos inversionistas y más de $394 millones en patrimonio administrado en fondos, un paso pionero en la industria por facilitar las herramientas de planificación financiera a un grupo más amplio y diverso de ecuatorianos. 

En tiempos de incertidumbre, la planificación financiera ofrece a las personas la oportunidad de anticiparse, siendo mejores las condiciones para sortear el futuro. Al momento de enfocarse en las perspectivas para el 2025, serán 365 nuevos días, con al menos doce estrategias para proyectarse en los siguientes meses.

Plantear sueños posibles: Actualizar las metas personales, bajo la convicción de que pasar del sueño a la realidad requiere planificación, siendo clave preguntarse ¿qué quiero lograr? y ¿en cuánto tiempo? para definir cuáles serán sus “sueños posibles”.

Objetivos SMART: Al decir “yo quiero”, está solo manifestando un deseo, pero es momento de pasar del sueño a la acción y para ello debe plantearse objetivos inteligentes o SMART por sus siglas en inglés. Plantéese objetivos específicos, medibles, alcanzables, realistas y que tengan un plazo en el tiempo.

El costo de sus sueños: Estimar el dinero que requiere para sus metas es el primer paso para planificar, y establecer las estrategias de ahorro e inversión.

Inteligencia financiera: Conozca cómo funciona el dinero, el ahorro, el crédito y el interés simple y compuesto; genere un presupuesto y distribuya sus ingresos dedicando al menos el 10% al ahorro; busque calculadoras para estimar el tiempo que llevará alcanzar sus metas. 

Responsabilidad tributaria: Esté al día en sus impuestos y conozca claramente sus aportes como empleado, o si es independiente o emprendedor. Marque las fechas de declaraciones y estime las deducciones e impacto en sus ingresos.

Dinero extra: Pagos extraordinarios como las utilidades anuales o los sobresueldos pueden gastarse o destinarse al plan de inversión personal. 

Revisar avances: Revise periódicamente su planificación, celebrando los logros alcanzados, aprendiendo y con flexibilidad de realizar los ajustes necesarios. 

Crecimiento patrimonial: Para cumplir sus sueños es necesario financiarlos, y un fondo de inversión es el instrumento ideal para lograrlo, como alternativa flexible en sus montos y la capitalización diaria que favorece el crecimiento del dinero.

Respaldo para imprevistos: Crear un fondo de emergencia no es un lujo, es una necesidad estratégica, y debe cubrir entre 3 y 6 meses de sus gastos básicos, proporcionando un colchón financiero que garantice tranquilidad ante posibles eventualidades.

Propósito personal: además de satisfacer necesidades inmediatas no descuide que el propósito de su planificación financiera debe incluir su crecimiento personal, familiar y ayuda a terceros. 

Consumidores responsables los momentos festivos y vacacionales son necesarios y pueden gozarse con responsabilidad financiera evitando el sobreendeudamiento.

Ciclos virtuosos: al cerrar el año realizar un balance integral, celebrando cada logro y aprendiendo de los desafíos enfrentados. Reflexione profundamente, diseñando estratégicamente su próximo ciclo, preparando reservas que le brinden tranquilidad y definiendo un plan que integre sus aspiraciones financieras y personales.