La industria cosmética está en constante búsqueda de ingredientes naturales y sostenibles para el desarrollo de productos enfocados tanto en el cuidado de la belleza como del medio ambiente. En este contexto, la tagua, también conocida como marfil vegetal, emerge como un tesoro natural con un potencial asombroso, como alternativa a ingredientes sintéticos ampliamente utilizados en la industria.
¿Qué es la Tagua?
La tagua es una semilla proveniente del fruto de la palma Phytelephas aequatorialis, especie nativa que crece en los bosques tropicales de Ecuador. Estas semillas son conocidas como "marfil vegetal" por su semejanza con el marfil de elefante, tanto en su apariencia como en su dureza.
“A los 15 años, las palmeras producen las primeras (nueces) semillas de tagua en una gran infrutescencia llamada “mococha”. Una vez madura, cae naturalmente al suelo, la primera corteza se abre para permitir que la segunda, suave y blanca, sirva como alimento para los animales salvajes del bosque como guantas o guatusas. Las comunidades locales recolectan las semillas que se envían a Manta para secarse al sol en grandes patios durante 2 meses. Posteriormente, más de 700 artesanos procesan las semillas manualmente para obtener la materia prima para elaborar artesanías o polvo de tagua, una tradición que cuenta con más de 150 años de historia”, añade Ignacio Maya para Expobelleza.
Beneficios en la cosmética
● Sostenibilidad: Una de las principales ventajas de la tagua es su contribución a la sostenibilidad. A diferencia del marfil de elefante, cuya obtención es altamente destructiva para la fauna, la recolección de la tagua no implica ningún daño a los animales ni a sus hábitats. Esto la convierte en una alternativa ética y respetuosa con el medio ambiente.
● Tagua en polvo: Se utiliza como exfoliante en fórmulas cosméticas. Actúa como agente blanqueador y potenciador sensorial, además de que ilumina la piel. Gracias a su color blanco de origen vegetal único en el mundo, no altera el color de la fórmula.
● Propiedades hidratantes: La tagua es rica en aceites naturales, con propiedades hidratantes y suavizantes para la piel. Estos aceites son especialmente beneficiosos en productos de cuidado de la piel.
● Resistencia y durabilidad: La dureza de la semilla de tagua la hace ideal para ser utilizada en productos como brochas de maquillaje, mangos de herramientas cosméticas y tapas de envases. Su durabilidad asegura una larga vida útil para estos productos.
● Versatilidad de diseño: La tagua es altamente moldeable, permitiendo a fabricantes de cosméticos crear una variedad de formas y diseños personalizados. Esto beneficia a las marcas que buscan destacarse en el mercado.
● Biodiversidad y comunidades locales: La recolección de tagua es una fuente de ingresos importante para las comunidades locales de Ecuador. El uso de productos derivados de la semilla de tagua contribuye al desarrollo sostenible y a la conservación de la biodiversidad, ya que brinda incentivos para la protección de los bosques donde la palma de tagua crece silvestre.
La tagua se ha utilizado en la fabricación de una variedad de productos cosméticos. Algunos ejemplos incluyen:
● Sustituto de las microesferas de plástico en la industria cosmética.
● Brochas de maquillaje con mangos de tagua.
● Envases de cremas y bálsamos labiales.
● Accesorios de belleza, como peines y espejos.
● Botones de diseño en envases de productos.
Para Ignacio Maya de Expobelleza, el polvo de tagua es una excelente alternativa para la industria cosmética por ser natural, orgánico, vegano, libre de crueldad animal, sostenible, microbiológicamente controlado, con certificaciones COSMOS y NATRUE; y, además, no cuenta con procesos que lo modifican genéticamente. “El polvo blanco de tagua sustituye a ingredientes sintéticos. Por ejemplo, YuraQ funciona como materia prima para elaborar exfoliantes corporales y faciales, maquillaje, cremas, entre otros. En la feria podrán conocer más de estas novedades de la industria, vincularse de manera directa con proveedores y captar nuevos clientes.”
La tagua se ha convertido en un recurso valioso en la industria cosmética, no solo por su belleza y durabilidad, sino que su uso promueve la sostenibilidad y el bienestar de las comunidades locales. A medida que las marcas buscan alternativas naturales y respetuosas con el medio ambiente, la tagua brinda una solución ética y versátil que promete un futuro más brillante tanto para la belleza como para la naturaleza. Su historia como "marfil vegetal" continúa evolucionando, aportando beneficios a la sociedad, al planeta y a la industria. Al usar tagua en sus formulaciones, las empresas cosméticas contribuyen a 9 de los 17 objetivos del Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.